Page 7 - ASOEX INFORMA ONLINE Nº60
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En estos instantes estamos  nalizando una propuesta respecto a lo solicitado por la Presidenta de la República referida a la Agenda de Productividad y Pro-Crecimiento, la cual deseamos concordarla con nuestro Ministro de Agricultura, para luego hacerla llegar al Sr. Ministro de Economía, para los  nes pertinentes. Se incluyen materias relativas a Promoción de Exportaciones y Apertura de Mercados, Simpli cación de Trámites, Exportaciones de Frutas y Servicio Nacional de Aduanas, Infraestructura y Logística, Recursos Hídricos, Rediseño de la Estrategia de Competitividad del Kiwi, Energía y E ciencia Energética, Financiamiento y Emprendimiento, Institucionalidad Inocuidad Alimentaria, Plagas Cuarentenarias, y Capacitación y Competencias Laborales.
Deseamos detenernos un instante respecto de los dos últimos temas, dada su trascendencia. Se nos hace difícil concebir que por un lado estemos estimulando nuestra integración física y económica con nuestros vecinos y a la par no poseamos la infraestructura ni los recursos necesarios como para evitar la indudable mayor presión  tosanitaria de plagas y enfermedades procedentes de países con mayor presión que la nuestra. Ello nos está haciendo perder la calidad de suerte de“Isla Fitosanitaria”que hemos enarbolado internacionalmente, a propósito de la presencia de plagas que están produciendo un daño signi cativo y que podrían limitar nuestras exportaciones considerablemente. Es el momento de pensar seriamente en la creación de un Fondo de Emergencias Fitosanitarias que se haga cargo de estos problemas de una manera e ciente y contundente.
Respecto de Capacitación y Competencias Laborales, ello se enmarca en nuestro espíritu de aportar al DESARROLLO INTEGRAL DEL SECTOR, en este caso especí co en lo que respecta a nuestros trabajadores, en el sentido de permitirles sentirse parte de proceso frutícola y que su actividad laboral la perciban como un bene cio personal en su desarrollo como trabajadores y personas.
Una manifestación concreta de esto fue la creación del OTIC AGROCAP el año 1999, cuando en toda la agricultura chilena se capacitaron tan sólo 18.000 trabajadores.
Así, desde hace 16 años, la formación del capital humano de nuestra industria, se ha traducido en la capacitación, en temas pertinentes, de más de 250.000 trabajadores.
Se han otorgado más de 18.000 becas gratuitas, privilegiando a mujeres temporeras, apoyando su profesionalización.
También, mediante las becas se ha llevado a cabo un programa especial dirigido a capacitar y otorgar apoyo para la inserción laboral de más de 1.000 jóvenes discapacitados. Mención especial merece la implementación a través de AGROCAP, del Sistema Integral de Medición y Avance de la productividad, SIMAPRO, modelo de gestión, que mediante el involucramiento de todos los niveles de la organización, desde los trabajadores, mandos medios y jefaturas superiores, los cuales en reuniones de retroalimentación , plantean soluciones prácticas y concretas, para las más diversas situaciones que se enfrentan en el día a día, lográndose aumentos de productividad de hasta un 25%, aumento de la calidad de hasta un 35%, disminución de la tasa de accidentabilidad de hasta un 75%, menor ausentismo y un notable mejoramiento del ambiente laboral. Y lo más relevante, generándose aumentos de los ingresos de los trabajadores de hasta un 20%.
Asimismo, desde el año 2003 en que se llevó efecto la primera ceremonia de certi cación de competencias laborales, a la fecha, se han certi cado más de 15.000 trabajadores, Desde el año 2013, hemos constituido un Centro de Evaluación y Certi cación propio de ASOEX, primer sector acreditado en el sector agrícola nacional.
Su objetivo primordial es la evaluación, veri cación y certi cación de trabajadores del sector frutícola en competencias inherentes a sus o cios, experiencia personal y laboral, desarrollada en el transcurso de su vida profesional, lo que permite un reconocimiento formal de las labores realizadas, mejorando la autoestima de los trabajadores y su productividad, entre otros aspectos tan relevantes como la convivencia interna.
No es de extrañar que estemos  nalizando nuestra intervención en un aspecto relacionado con el sector laboral, relativo a las personas, a lo que hemos considerado como el eje central de todas nuestras acciones y en cualquiera de los roles que asumen en la tan amplia variedad de responsabilidades existentes en nuestra actividad.
Queremos por lo tanto rea rmar esa profunda convicción en cuanto a reconocer en nuestros trabajadores, mujeres
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